Streetcar[Erika]

La noche anterior había habido una fiesta en mi casa. Hacía tanto tiempo que no preparaba fiestas...Nos habíamos juntado cerca de veinte personas, y había sido genial. Piscolabis, bebida, música, flirteo...un éxito. Pero claro, toda fiesta tiene sus consecuencias, y me había quedado sin comida. A no ser que quisiera desayunar una lata de atún con guacamole, más me valía ir a comprar algo, o desayunar fuera antes para no morir de hambre. Me decanté por la segunda opción. Kensington no estaba demasiado lejos de mi casa, y conocía un restaurante-cafetería donde se desayunaba como los dioses si ibas temprano. Miré mi reloj, aún no eran las siete. Perfecto. Después de desayunar, iría al supermercado Morrisons.

Me puse un femenino vestido violeta acompañado de mi chaqueta de cuero de los ochenta y me hice un par de trenzas. Me miré al espejo y sonreí antes de ponerme unas botas militares color lila. Normalmente no me arreglaba, pero de algún modo tenía que compensar la cara de zombie que llevaba tras haber dormido tres horas. Con algo de maquillaje solucioné las ojeras. Y salí al portal. Podía ir andando, y efectivamente no tardé demasiado en llegar. Me senté en una mesa vacía- de las pocas que quedaban- y pedí un desayuno completo con zumo de naranja, tostadas de tomate, salchichas y beicon. Ya estaba absorta en la comida, pues el estómago más que gritar, me rugía, cuando una voz me sacó del ensimismamiento. La miré, era una mujer de hermosos ojos, preguntaba si podía sentarse a mi lado. Me encogí de hombros.

- No, claro que no. Puede sentarse si quiere.- sonreí e intenté no parecer demasiado hambrienta, reduciendo considerablemente el ritmo al que comía.